Por Emerson Morales | Foto: FIFA – FPF – UEFA
Si hablamos de Ricardo Filipe da Silva Braga sería nombrar a algún jugador de alguna liga incomprobable de futbol, que quizás se hizo viral por alguna jugada curiosa y que rompió el molde de lo típico que vemos en este deporte, sin embargo si cambiamos el sentido y les cuento que ese hombre es Ricardinho la cosa cambia. Para un amante del Futsal, hablar de este virtuoso con el balón es como conversar de las hazañas de Messi, el gordo Ronaldo, Cristiano, etc.
El astro portugués es uno de los ídolos y referente para las nuevas generaciones que conocen y que empiezan a amar este deporte, y es que su curriculum no es menor, seis balones de oro lo avalan.
El jugador portugués de 36 años, nacido en Valbom, después 17 años vistiendo la camiseta de su selección tomó la decisión de anunciar su retiro de la selección portuguesa. “Es la decisión más difícil que voy a tomar en mi carrera deportiva, pero creo que hay que dejar sitio a los más jóvenes”, comentó para los medios que se tomaron cita en la Ciudad Deportiva de la Federación Portuguesa de Fútbol.
A nivel profesional el jugador luso ganó todo lo que podía ganar en el Futsal. Lideró la coronación de Portugal con un golazo en la final de la Eurocopa jugada el 2018 en Eslovenia donde derrotó por 3-2 al gran favorito, España.
La guinda de la torta llegó el pasado mes de octubre, donde consiguió lo único que le faltaba y por lo que tanto había luchado, la Copa del Mundo en Lituania donde en un autentico partidazo los portugueses derrotaron por 2-1 a Argentina quien llegaba como defensora del titulo a esa instancia en Kaunas, no solo se colgó la medalla sino que también se logró llevar el MVP del torneo.
El mundial lo vivió en un rol mucho más secundario por su lesión en el tendón largo que casi le arrebata el sueño de disputar lo que él mismo había declarado que era su ultimo baile.
El astro luso en una entrevista a Radio Marca de España reveló lo mal que la pasó en la cita planetaria: “Este año ha sido muy difícil para mí. La cabeza manda, hemos visto el caso de Biles y eso me ha tocado mucho. Me pasó en el Mundial, cada día para mí era un sufrimiento”.
El crack pone fin a su trayectoria con el combinado nacional portugués con 187 partidos jugados, en los que ha marcado 141 goles, donde llegó a disputar siete Eurocopas y cinco Mundiales. En Mundiales ha disputado un total de 23 partidos, en los que ha marcado 22 tantos, y durante las siete Eurocopas que jugó dejó en su haber 22 goles en 21 partidos, unas marcas que le sitúan como el máximo goleador histórico de Portugal.